dijous, 22 de setembre del 2016

Que llegue ya octubre

Que llegue ya octubre y se pasen las prisas, la sequía, esta angústia asfixiante que no me deja respirar.
Que llegue ya octubre y lance misiles de hojas sobre todas las aceras de la ciudad. Que no me deje andar, ni siquiera salir de mi casa.
Que llegue ya octubre para poder decir que he sobrevivido una estación sin estar a tu lado.
Que llegue ya octubre para saber que he hecho todo lo que tenía que hacer y no he fallado, como creía.
Que llegue ya octubre para salir a bailar.
Que llegue ya octubre porque nos quedará menos para volver a ver Madrid.
Que llegue ya octubre porque es cuando más bonito está el mar.

dimarts, 13 de setembre del 2016

La vida del adulto

Hacerme autónoma, llamar a la gestora, comprarme una libreta, una agenda, un boli. Hablar con las escuelas, los padres, los directores, mis jefes, mis alumnos. Buscar un piso, ocuparme de poder pagarlo. Llegar a todo. Tener una vida: poder ver a mis amigos, ser capaz de volver a encontrar a alguien para no echarte tanto de menos. Repetir el trabajo de final de carrera, intentar no matar a mi directora. Volver a ver Harry Potter. Poder irme de vez en cuando de fin de semana, no dormirme en las cenas organizadas. Volver a entenderme con mis padres, saber que mi abuela va a estar bien y que nadie me reproche que no la quiero suficiente. Despedirme de mi conejo y buscar un perro que sea tan bueno como el de mi hermana. Rezar para no caer enferma y tener que pedir más sustituciones. Y lo menos importante, ser feliz.

divendres, 9 de setembre del 2016

Viernes en la luna de Valencia

Tiemblo. Tiemblo porque tienes el poder de hacerme sentir pequeña, inútil, insignificante. Tiemblo porque me haces dudar incluso de mis propios éxitos. Dudo de ser demasiado arrogante. Dudo de querer luchar contra tu abuso de poder. Dudo de estar siendo esclava de mi propio miedo y proyectarlo sobre tus decisiones. Dudo por costumbre. Dudo por miedo. Por miedo a equivocarme. Por el terror que me provoca no estar eligiendo el buen camino. Por estar perdida. Por no saber si voy a ser capaz de encontrarme. Dudo de no estar escribiendo las palabras correctas. Dudo de que esté enfadada y solo sea tristeza lo que me quede al final. Hoy dudo incluso de estar viva.

dijous, 8 de setembre del 2016

Dos meses y me olvidaste

Te castigo porque me siento traicionada.
Te castigo porque te culpo de mis propias acciones.
Te castigo porque no me entiendo a mi misma.
Te castigo porque ya no se lo que quiero.
Te castigo por haberme rechazado.
Te castigo porque actúas como si ya no te importara.
Te castigo por intentar rehacer tu vida.
Te castigo porque sigo con tu olor en mi brazo.
Te castigo porque odio querer castigarte.
Te castigo por querer olvidarme
Te castigo para intentar no querer besarte.
Te castigo para intentar odiarte.

La primavera se ha quedado sin amaneceres

Callas. Con una cerveza en la mano y una sonrisa que responde a la brisa que se pasea por tu pelo. Te muerdes el labio. Siempre lo haces cuando te sientes feliz, tranquilo, afortunado. Me miras y le pegas otro trago al botellín. No sabes cómo me gustaría ser ese pedazo de cristal. Para que me bebieras con tantas ganas, con tanto deseo, con tanta urgencia. Como me gustaría ser esa efervescencia, esa bocanada de aire fresco entrando suavemente entre tus labios, entre tus dientes, entre tu lengua. Pero tú solo callas. Y miras el mar, en silencio. Como haces siempre.